Cuando alguien confía en ti de una manera especial, hace que te sientas realmente emocionada, saber que hay alguien para quien vales mucho en su vida.
Y eso me ha ocurrido a mí. Hay una persona que me ha confiado su bien más preciado en este mundo. Cuando me pidió mi consentimiento, me invadió el miedo de arriba a abajo, es una gran responsabilidad. Pero a la vez me emocionó de tal manera el que hubiese pensado en mí que el agradacemiento es infinito.
Esto es un secreto, no se puede contar ni dar más información. Espero llevármelo conmigo hasta el final de los días y que no haga falta contárselo nunca a nadie.
Ya está hecho. No hay marcha atrás. Formo parte de un "algo" muy especial.
Esta entrada en el blog quizás parezca absurda. Pero me he emocionado al recibir un sms que me lo confirmaba y tenía que escribir, contarlo. Compartirlo. Para eso está este blog, para escribir.
Pero no puedo decir más. Ahí queda...
Mil gracias a quien ha pensado en mí (a ti) por tantas cosas, pero hoy, principalmente, por esta... Ojalá nunca haya que contar este secreto.
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